Te amo con toda mi alma, mi corazón, mi cabeza cuando piensa y cuando no. Te amo a través de los fríos kilómetros que hacen que tu tacto sea más cálido. Te amo cuando tiembla mi cuerpo al notar tus abrazos que obligan a mi boca a sonreír, a mis ojos a cerrarse... Te amo cuando acercas tu cara a la mía y un beso nos une. Te amo cuando me dices todas esas cosas que me hacen sonreír, cuando me consuelas al ver las lágrimas caer, cuando me haces más fuerte con cada palabra salida de tus labios. Te amo por tu forma de ser, por tu corazón que no conoce el odio. Te amo por esos ojos brillantes que miran a través de mí, por esa nariz que es perfecta para besar, esos finos labios, ese pelo revuelto. Te amo por ser quien eres, un capitán que me guía cuando siento que el barco va a la deriva. Te amo porque eres mi reflejo, soy tu espejo. Te amo por encima de cualquier defecto, porque el amor es más fuerte que cualquiera de ellos y porque también los amo, simplemente, porque son parte de ti, son parte de esa gran persona a la que amé, amo y amaré pues la vida con ella coge color y me empiezan a gustar las flores, su perfume, su olor... Muchas cosas llenan mi vida ahora, pero quien la completa, pues es parte de mi corazón, eres tú y por eso también te amo. Por hacerme feliz te amo. Te amo, porque eres tú.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Vistas de página en total

Blog de escritura de Dormida entre Rosas. Con la tecnología de Blogger.

Seguidores